Durante el Año de la Orientalidad 1975 se realizo una fuerte campaña propagandística a cargo de la Dirección Nacional de Relaciones Publicas, especializada en la comunicación del gobierno dictatorial.
Recopilamos un conjunto de piezas propagandísticas oficiales representativas de ese año, publicadas en el diario El País, para realizar su posterior análisis de contenido, identificando patrones centrales que contrastamos con modelos teóricos de comunicación. A partir de ello, y entendiendo a la comunicación como una herramienta crucial legitimadora de un gobierno, intentamos reconstruir un posible modelo comunicacional utilizado por la DINARP durante 1975.
Concluimos que el discurso analizado se asemeja considerablemente a la Teoría de Efectos Limitados (Lazarsfeld), infiriendo que el receptor era considerado heterogéneo.
Los eslóganes emitidos durante el proceso fueron pocos y reiterados, presentando un mismo concepto bajo diferentes perspectivas. La creación de lemas apuntaba a la simplicidad con el fin de ser comprendidos y recordados por la mayor cantidad de los receptores, obteniendo así una eficaz aplicación, por ejemplo: “El año de los sesquicentenario de los hechos históricos de 1825” fue sustituido por “Año de la Orientalidad”. Por la utilización de esta técnica, y la fuerte censura aplicada, se puede deducir que el emisor consideró que la retención, recepción, interpretación y respuesta eran selectivas, entendiendo que los efectos del discurso serian limitados. Se recurrió a diversos medios: audiovisual, escrito y radial, como herramientas para llegar a toda la población, buscando generar simbólicamente una unidad nacional. Bajo estos distintos formatos se puede encontrar un programa de comunicación política coherente, un modelo de comunicación aplicado.
Integrantes del equipo:
Marina Bernaola
Eliana Marquez
Victoria Mujica
Carolina Olivera
Docente orientador:
Gerardo Albistur