Abordamos un sector de la educación media montevideana desde la perspectiva de “la relación con el saber” de Bernard Charlot. Buscamos analizar el desempeño del alumno según el sentido que le otorga a sus procesos de aprendizaje.
No buscamos restarle importancia a las variables socio-económicas (como los ingresos del hogar del estudiante), sino complementarlas con un análisis que explique cómo también hay estudiantes de contextos económicos “favorecidos” que desertan.
Hicimos entrevistas a estudiantes y observaciones en aulas de los liceos IAVA y Purificación, para indagar en las interpretaciones que hacen los estudiantes de su vida liceal, y en sus formas objetivas de interacción.
Primero identificamos reglas formales impuestas por los liceos, y luego observamos cómo se articulan con conductas que los estudiantes “traen” de su vida cotidiana. Vimos cómo es que la adolescencia y el género designan comportamientos que obstaculizan o favorecen el vínculo con la institución educativa.
Pero la categoría central es la “relación con el saber”: un alumno no necesariamente será exitoso si logra adaptarse a las reglas formales. Debe establecer una relación con el conocimiento de las asignaturas que no dependa exclusivamente de los agentes que lo vehiculizan.
Pueden haber conductas recurrentes de profesores que conspiran contra el interés del estudiante por la materia; pero también estudiantes que establecen una relación positiva con el saber (matemático, filosófico, o el que sea) independientemente de los agentes que lo vehiculizaron.
Integrantes del equipo:
Agustina Marques
Bruno Andreoli
Camila Mandl
Docentes orientadores:
Marcos Supervielle
Cecilia Tomassini