La presente investigación reflexiona acerca del lugar que ocupa el Teatro de Verano, como parte de procesos de transformaciones estructurales de la sociedad en sus dimensiones políticas, económicas, sociales, culturales; expresados a través del desarrollo de conflictos varios, en un territorio determinado. Su proceso de gestación, y su papel dentro de las estructuras y relaciones de poder existentes.
En esta línea, la organización en que se sustenta el Teatro, nace como respuesta de resistencia y construcción alternativa, a las relaciones de dominación y a los procesos de segregación impulsados por el modelo neoliberal, entendido bidimensionalmente como: patrón de acumulación de capital, es decir, modelo de desarrollo y; como utopía totalizante, de dominación ideológica.
Como trasfondo de las acciones realizadas por los protagonistas de esta resistencia, se encuentra un proyecto de sociedad alternativo al hegemónico, que se construye en la práctica cotidiana. Siendo algunas de sus características, el ser un proyecto colectivo, autogestionado, plural e independiente. Lo que supone un quiebre con las estructuras organizativas políticas tradicionales.
En este sentido adquiere gran importancia el cómo, es decir, la estructura y los medios reconocidos como político-pedagógicos, estructuradores de subjetividades-objetividades que actúan en el hacer cotidiano, en la vida de los sujetos.
Integrantes del equipo:
Nicolás Jara Telechea
Camilo Zino García
Docente Orientador:
Beatriz Diconca